martes, 19 de octubre de 2010

Día 19 Isla Victoria – Bosque de los Arrayanes

Hoy tampoco hemos tenido que madrugar. Ha amanecido lloviendo y ya pensamos que la excursión sería un desastre.

A eso de las 12:00 embarcamos en Puerto pañuelo destino a  Isla Victoria ( la única manera de llegar a ella es a través de una excursión contratada). El día comienza a mejorar y va saliendo el sol. Llegamos en unos 40 minutos a la Isla. Realmente es preciosa. Las vistas al lago son constantes y se divisa la cordillera nevada.

El grupo con el guía inicia una de las rutas; la ruta “roja” (ex vivero), nosotros decidimos iniciar la ruta amarilla por nuestra cuenta así estamos solos para poder hacer las fotos y ver las pinturas rupestres que quería ver Jordi. El sendero ocupa unos 300 metros hasta llegar a la playa del Toro y a las pinturas rupestres. Estas pinturas tienen unos 700 años, son diseños Tehuelches y de sus antecesores. Hay muy poquitas y ya no se aprecian los colores, pero son interesantes de ver.

Playa Toro está desierta, el paisaje es fantástico. Justo en la orilla podemos ver Cauquenes de cabeza gris muy de cerca. .


Después de hacer unas cuantas fotos, nos dirigimos al recorrido rojo. Comienza con unos grandes arcos de vegetación que te conducen a una senda de grandes secuoyas. Son impresionantemente grandes!

Seguimos por el sendero y se ven diferentes árboles no originarios de la zona, fueron importados alrededor de 1950 para repoblar la isla (entre otros motivos) porque se habían destruido el 50% de los árboles en la explotación maderera.
Seguimos la ruta y decidimos continuar por la naranja que nos conduce al mirador de la isla. Buena elección, las vistas son fantásticas.


Durante el camino vamos comiendo los bocadillos que nos hemos traído. Justo nos da el tiempo para hacer unas fotos antes de entrar al catamarán que nos conducirá al Bosque de los Arrayanes en la Península Quetrihué. El trayecto dura aproximadamente una hora.
El bosque de los arrayanes (Luma Apiculata) de Bariloche es el único Bosque de Arrayanes del mundo, desde el sendero entablonado se pueden apreciar ejemplares centenarios. El arrayan tiene una corteza de color canela y su madera es totalmente blanca. Sorprende cuando lo tocas, está muy frío a diferencia del resto de árboles del lugar.

Para visitar este bosque sólo te dejan unos 50 minutos, muy poco para poder hacer el recorrido tranquilos, Igualmente intentamos aprovechar el tiempo y sacar buenas fotos del lugar.

Hasta este bosque se puede llegar desde Villa La Angostura, el sendero es de unos 13 kilómetros, se ha de ingresar antes de una hora determinada de la mañana y registrarse en el parque nacional que se hace esta ruta.
El último tramo de estos 13 kilómetros es precisamente el Bosque de los Arrayanes.


De regreso, el catamarán tarda unos 60 minutos hasta Puerto pañuelo.

Recomendaciones: Si disponéis de algunos días y tenéis ganas de caminar, lo ideal es hacer la ruta hasta el Bosque de los arrayanes a pié desde Villa La Angostura. Si estáis en el centro de Bariloche bien podéis alquilar un coche hasta Villa La Angostura o llegar a través del transporte público (mucho más económico). El problema del transporte es que los autobuses que llevan hasta allí salen de la parada de Omnibús que está justo al lado del aeropuerto, que está a tres kilómetros del centro, lo que implica coger otro transporte hasta allí.
Los guardabosques no dejan ingresar a la ruta durante todo el día, pienso que es hasta las 11 de la mañana. Contar que desde el Omnibús hasta La angostura hay más de una hora.
El regreso se puede hacer andando o por Ferry que tenéis que contactar antes de salir.

Si queréis visitar Isla Victoria, cosa que os recomendamos, no hay otra forma que visitarla a través de excursiones contratadas, con el inconveniente de los horarios acotados, pero no hay ningún ferry que te lleve hasta allí.

Hay muchos trekkings en el parque natural de Nahuel Huapi, para mas información os tenéis que acercar al parque a preguntar, el centro de información turística no os la dará.

Hay trekkings con guía al Cerro Tronador, desde donde se pueden ver los glaciares, este dura aproximadamente unas 4 horas 30 minutos. Este se puede contratar en las oficinas de excursiones que veréis en el centro.

Día 18 Villa los Coihues – Lago Gutiérrez.- Cascada de los Duendes

Este día decidimos levantarnos tarde y coger el transporte público para llegar a Villa los Coihues, justo donde está el lago Gutierrez y la Cascada de los Duendes.

Después de llegar al centro el dilema fue encontrar la parada, ya que la mayoría no están marcadas y no sabes cual es el autobús que te lleva. Finalmente cogemos el 50 que nos dejó en la carretera. Cuando bajamos pensamos… pero donde coñ.. estamos? Decidimos seguir a la gente que parecía saber donde iba i si! Llegamos al “pueblo”. El lago Gutierrez nos da la bienvenida. Se ven cuatro casas de madera diseminadas, el bar cerrado. Seguimos caminando hasta que encontramos alguien que nos indica el camino para llegar a la cascada. Es camino es la carretera que te lleva hasta el camping, A la izquierda de la carretera queda el lago y todas las hosterías y cabañas del lugar. Después de unos dos kilómetros aproximadamente llegamos al camping y a su derecha se bifurca un camino que se adentra mas en el bosque. Es un bosque bonito de grandes árboles, coihues y pinos. Actualmente la acampada en este bosque no está permitida para ayudar a la regeneración de la arboleda. El camino te conduce hasta la cascada de los Duendes. Es muy bonita.


Estamos cansados pero decidimos esperar a comer en el centro de Bariloche. Tenemos suerte y cogemos (perdón agarramos! Aquí coger es otra cosa) el autobús de vuelta enseguida.

En el centro nos comimos una fondue y ya con energías renovadas recorrimos el centro. No se como nuestros pasos nos llevaron al Jacky a tomar unas cervezas.

Día 17 Puerto Blest Cascada de los cantaros

Aquí el tiempo está loco, bien llueve, hace sol o ambos a la vez… Hace frío. Nos dirigimos a Puerto Pañuelo a coger la embarcación que nos llevará a Puerto Blest ( es la única manera de poder llegar; por agua).

Durante la navegación vemos que las gaviotas van persiguiendo la embarcación, pronto descubrimos que es costumbre de los turistas darles alimentos (normalmente galletas). La gente se anima y les van dando comida, llega un momento que parece una película de miedo!! No me inspiran mucha confianza…

En Puerto Blest tienes la opción de navegar por el Lago Frías y divisar el cerro Tronador (obviamente por 70 pesos más). El día no acompaña y estamos un poco cansados de tanto barco así que decidimos hacer el recorrido a pié (una de las alternativas que preferimos siempre). Esto son 3 kilómetros ida y 3 de vuelta. El sendero no es bonito, hay que pensar que es la carretera que te conduce al puerto del Lago Frías. Igualmente intentamos adentrarnos en el bosque por el camino para poder ver el río, es de color verde.
Un poco cansados llegamos al puerto, la vista es bonita pero nada mas.


Durante el regreso a Puerto Blest comienza nuevamente a llover, pero ahora con más intensidad….llegamos al hotel y sin vianda!! Preferimos no comer en el restaurante, unas patatas y un par de cafés nos permitirán aguantar para una cena descansada en el pueblo.

La espera se hace eterna.

Llega la hora de embarcar para ir a la Cascada los Cántaros. Aunque llueve decidimos subir las mas de 600 escaleras que te permiten ver el nacimiento de la cascada. Una vez llegamos arriba vemos que ha valido la pena, El arce milenario (1500 años estiman) es precioso, y las vistas desde el mirador espectaculares!







 

Este es el final de la excursión, el regreso se hace eterno, la lluvia no cesa.

Día 16 Calafate-Bariloche

Hoy es día de vuelo, son estos días tontos del viaje que dependiendo de los horarios no puedes hacer ninguna excursión pero tienes algunas horas muertas.
Decidimos levantarnos lo mas tarde posible e ir a visitar los alrededores del Calafate, concretamente el Lago Argentino y la Laguna redonda, donde se pueden ver algunos flamencos y gaviotas.


Como no el vuelo vuelve a venir con un par de horas de retraso! Al menos hoy lo sabemos con anticipación y podemos comer algo decente en el hotel

Llegamos a Bariloche bien entrada la tarde, lo justo para llegar al hotel Design Suites, un buen hotel pero a 2,5 kilómetros del centro.

Este mismo día descubrimos un fantástico Bar, el Jacky After office, que os recomendamos fervientemente: buena música, buena cerveza, buena comida, y buen ambiente. El camarero que nos atendió, Pedro era encantador.

Día 15 Torres del Paine Chile

El día comienza temprano, como siempre. Nos espera un largo camino hasta la frontera de Chile, y un poco mas hasta llegar al Parque Nacional de las Torres del Paine.

La duración del viaje es de unas cinco horas aproximadamente de ida y otras más de vuelta. El camino hacia allí es como diríamos aquí …un camino de cabras!  acompañado de un paisaje totalmente estepario, es decir una infinita nada.

La primera parada se hace en una “gasolinera” en medio de la estepa, no hay que pensar en una gasolinera de aquí, si no en un surtidor en medio del “desierto” con los únicos lavabos hasta Chile, imaginar… como decía el guía “esté como esté es lo único que hay hasta la frontera chicos!”

Llegamos a los trámites burocráticos: salida de Argentina. Tenemos suerte y no encontramos ningún ómnibus esperando ( el guía comenta que hay veces en que pueden estar esperando mas de hora y media para poder salir del país). En siete kilómetros aproximadamente encontramos la frontera de Chile y aquí nuevamente se hacen los trámites para la entrada. Se le ha de incluir el registro del equipaje porque no te dejan ingresar en el país nada de fruta ni fiambre ( si encuentran algo; sanción).

La comida obviamente no la puedes traer, si vas con el guía ya está todo mas que contemplado y en Chile te dan las famosas “viandas” pero mucho mas malas que las que puedes comprar tu en El Calafate (es lo que hay).

Normalmente se hace una parada en el bar que está justo al lado de la frontera, “El ovejero”, donde se puede comer algo y comprar algún souvenir (todo a precio mas que europeo!!).

Al fin llegamos al Parque Nacional Torres del Paine. El paisaje es fantástico. Una gran cordillera nos da la bienvenida. Ya se pueden ver manadas de guanacos y podemos parar para tomarles fotos, no se asustan, así que podemos hacer fotos de muy cerca. Es fantástico.



Seguimos nuestro trayecto y el guía nos va explicando las características del lugar y las posibles rutas que se pueden hacer en trekking.
Lo ideal es pernoctar allí un par de noches para poder disfrutar del contacto con la naturaleza. El clima es duro, hace frío y el aire es brutal, como dicen ellos es “el aire de mierda” o “el innombrable”. Tienen razón el aire te lleva y te hiela!

Después de ver varios puntos del parque como el Lago amargo, la Cascada del río Paine, y las Torres del Paine a lo lejos, iniciamos un trekking de unas dos horas, desde donde tenemos una panorámica de las torres del Paine fantástica. Su nombre Paine quiere decir azul, viene dado porque su roca es magmática y tiene unos tonos azulados.



Si nos fijamos bien en los Cuernos del Diablo podremos ver dos partes bien diferenciadas, una la mas clara es la magmática y la otra, la roca que surgió del movimiento.



Las vistas son maravillosas! Las montañas nevadas, los lagos, los glaciares que se ven a lo lejos en la cordillera…. La Patagonia no deja de maravillarnos.



El trekking fue fantástico. Nos lamentamos no haber tomado un día mas en este parque para poder hacer el trekking que te lleva a las faldas de las torres. El guía comenta que son unas cinco horas ida. Lo ideal, si gusta el trekking es planificar algunos por allí.




El camino de vuelta lo hacemos por la conocida ruta 40.



El regreso al Calafate se hace un poco pesado, son cinco horas de autobús en camino de piedra y tierra, pero… la Patagonia nos reservaba una sorpresa en el camino, un maravilloso atardecer, el mas rojizo e impresionante que he visto en mi vida!! Que regalo para los sentidos. Que pena que las fotos no puedan transmitir los colores con su esplendor.




Ha valido la pena, pero si volvemos no dudaremos en quedarnos algunos días para poder disfrutar de este gran parque nacional.


Día 16 Calafate-Bariloche
Hoy es día de vuelo, son estos días tontos del viaje que dependiendo de los horarios no puedes hacer ninguna excursión pero tienes algunas horas muertas.
Decidimos levantarnos lo mas tarde posible e ir a visitar los alrededores del Calafate, concretamente el Lago Argentino y la Laguna redonda, donde se pueden ver algunos flamencos y gaviotas.

Como no el vuelo vuelve a venir con un par de horas de retraso! Al menos hoy lo sabemos con anticipación y podemos comer algo decente en el hotel

Llegamos a Bariloche bien entrada la tarde, lo justo para llegar al hotel Design Suites, un buen hotel pero a 2,5 kilómetros del centro.

Este mismo día descubrimos un fantástico Bar, el Jacky After office, que os recomendamos fervientemente: buena música, buena cerveza, buena comida, y buen ambiente. El camarero que nos atendió, Pedro era encantador.

Día 14 El Calafate Navegación Glaciares Upsala-Spegazzini-Perito Moreno

El día nuevamente comienza temprano. Nos dirigimos al Parque Nacional de los Glaciares a coger la embarcación que nos lleva a ver todos los glaciares del brazo norte. Parece que será un día largo, ya que se embarca a las 8:30 y se regresa a las 17:30 aprox.

La embarcación es muy cómoda, no cuenta con servicio de comida, sólo sirven bebidas así que para comer también llevamos las famosas “viandas”, hoy mejores, son del restaurante vegetariano de ayer.

La navegación se inicia por el brazo norte del lago Argentino. Aunque ayer ya vimos el glaciar Perito Moreno estamos igualmente emocionados. Se inicia la navegación y al poco tiempo ya podemos ver témpanos inmensos. La vista es fantástica. Hace frío fuera de la embarcación pero da igual, la vista vale la pena. Si te dejas llevar por la imaginación parece que estés yendo a la Antártida!


Poco a poco vamos llegando al frontal del Glaciar Upsala pero que ocurre? Imposible de llegar, hay una gran cantidad de témpanos que impiden el paso a la navegación, nos tenemos que contentar con verlo de bien lejos. Al glaciar Onelli también es imposible de acceder.

Seguimos el trayecto hacia el glaciar Spegazzini, a este si llegamos!! Es impresionante. Es el glaciar que tiene las paredes mas altas de todos! La embarcación nos lleva lo mas cerca posible del frontal, las vistas nuevamente son fantásticas, te quedas sin aliento (y no sólo por el frío). Realmente ya pensamos que la navegación ha valido la pena aunque sean tantas horas.


 
Después nos dirigimos a ver el tan famoso y renombrado glaciar Perito Moreno. Hoy podemos ver el lado norte (que ya pudimos ver el día anterior desde las pasarelas), sigue siendo impresionante. Su magnitud nuevamente nos deja sin habla. Por suerte podemos ver algunos desprendimientos, aunque menores el sonido es atronador, el silencio en la embarcación es total, todo el mundo está atento. Sólo se puede escuchar de fondo una horrenda música pop de la embarcación que le quita todo el encanto al momento. Intento no escucharla. Es extraordinario poder observarlo, pienso en la suerte que tenemos en ese momento.
Poco a poco la gente va entrando dentro de la embarcación, el frío apremia, nosotros nos quedamos fuera para despedirnos poco a poco de estas maravillosas vistas y emociones.

Llegamos a puerto aproximadamente a las 18:00, cansados pero muy satisfechos por las experiencias vividas. Realmente el Parque Nacional de los Glaciares enamora.

Que mejor fin de día que darnos un baño en la piscina climatizada del hotel con vistas al Lago Argentino, este hotel es fantástico! Je,je.

Día 13 El Calafate Perito Moreno

-         Ring ring (suena el teléfono)
-         Diga?
-         Son las seis de la mañana
-         Gracias.

Ahh!! Aquí no se deja de madrugar! Pero hoy vale la pena, nos vamos a ver el Glaciar Perito Moreno! La emoción me embarga ya en el desayuno solo de pensarlo.
Nos dirigimos al Glaciar, a coger la embarcación que nos va a llevar directamente para hacer el trekking en el glaciar.

Llegamos al Parque Nacional de los glaciares en aproximadamente una hora (unos 70 kilómetros desde el centro de Calafate). Embarcamos en una pequeña embarcación que nos lleva al otro lado del glaciar desde donde se inicia el trekking. El agua es densa, lechosa, de un color blanco verdoso. Ya se puede ver el glaciar, es impresionante! Una gran mole de hielo, inmensa, que no te cabe en los ojos, no puedes dejar de repasarlo con la mirada y pensar, ahora vamos a estar encima! Es emocionante!

Llegamos a una cabaña donde se han dejar las bolsas y comida ( aquí no hay nada donde vendan ni bebidas ni comida, lo has de traer todo, pero no os preocupéis en el Calafate esto está todo mas que controlado y podréis encontrar muchos sitios donde preparan las famosas “viandas” que podréis llevar a las excursiones de todo el día. El hotel también prepara pero normalmente es un poco mas caro).

El guía de montaña nos da un poco de información básica sobre los glaciares, nos explica que el glaciar Perito Moreno es el único que no está en retroceso; la ganancia es igual a la pérdida. Son glaciares de Valle.
A diferencia del clima de otros lugares con Glaciares, aquí no hace mucho frío, lo que también ayuda al retroceso de estas inmensas moles.



El guía nos recomienda no ir con mucha ropa al trekking, tiene mucha razón, la verdad es que durante el camino hace calor y la ropa sobra. La temperatura ambiente es de 8 grados a lo que tenéis que sumar el calor de la actividad física.
OJO llevar guantes es obligatorio! Aunque si se os olvida allí tienen unos cestos grandes con guantes “militares o de mil usos” para que podáis hacer el trekking.

Nos acercamos al lugar donde nos ponen los Crampones. Por el camino hemos podido ir viendo el glaciar, la vista es maravillosa y única, estamos tan cerca…Iniciamos el camino! Ya pisamos el glaciar! La emoción es intensa, parecía que este día no iba a llegar nunca!


Durante el recorrido de aproximadamente una hora y media vamos viendo las diferentes grietas en el glaciar, sumideros de azul intenso por donde se cuela el agua hasta el fondo del glaciar, y cóndores!! La vista es maravillas. Jordi va riendo con sus Crampones jeje parece todo un escalador! Caminar con ellos deja de ser complicado y vamos cogiendo confianza. Cuando la excursión va llegando al final nos espera una sorpresa, dos grandes mesas de madera sobre el glaciar, con whisky y alfajores!! Todos empezamos a aplaudir y a reír. Uno de los guías de montaña picó hielo del glaciar, lo puso en un bol i flash!! Llenó todos los vasos de una vez, todos aplaudimos! Y como no tomamos el whisky con el hielo del Perito Moreno, una aventura para explicar. Fue maravilloso.


 
Finalizada la ruta por el glaciar fuimos a comer las famosas “viandas” que llevábamos. El lugar elegido era impresionante, comiendo el bocadillo en una de las mesas de madera desde donde se veía toda la parte sur del glaciar! Teniendo estas vistas quien se queda en la cabaña! 


 
Después de comer navegamos hacia la orilla para ir a ver el glaciar des de las pasarelas. Si vas en una excursión contratada te dejan mas o menos una hora, un tiempo realmente insuficiente si quieres hacer el recorrido de todas las pasarelas, os recomiendo si es así que hagáis el recorrido corto y le dediquéis tiempo observar si hay algún desprendimiento, el sonido es sobrecogedor, es similar a un gran trueno, de esos que parece que no acaban y que cuando los escuchas piensas Dios que tormenta! Pues mas impresionante.

En las pasarelas hace mas frío que durante el trekking, pero la espera vale la pena y vemos dos o tres desprendimientos. Es una maravilla. La hora se hace muy corta y toca el regreso hacia El Calafate, cansados pero con una experiencia maravillosa.

Como bien dicen, “la vida no se mide por el número de veces que respiras si no por las veces que te quedas sin aliento” esta es una de ellas.

Recomendaciones: El Trekking Big Ice ha de ser impresionante, si podéis contratar este, no os dejéis engañar por algunas agencias, la edad máxima es de 45 años y no de 40 como ellos dicen. Obviamente se ha de estar en buena forma porque la duración es de unas tres horas caminando sobre el glaciar con los crampones y tres horas más de montaña.

Si podéis contratar un coche o excursión al Chalten, nosotros no pudimos hacerla pero por lo que nos comentaros es una zona de vistas preciosas donde se puede practicar trekking, así que si tenéis ganas de andar guardar uno o dos días para visitarlo.

Lo mejor es no traer nada contratado, si das una vuelta por el Calafate veréis que hay muchas agencias de excursiones, (es su actividad principal) así podéis ir escuchando las experiencias de otros viajeros y decidir.